Capítulo 612
Hablaban como si ella no estuviese allí. ¿No se suponía que las damas de alta sociedad solían esparcir cheques? ¿Por qué éso no seguía la lógica común?
Ella todavía estaba siendo sujetada por Flora, quien le dijo: “Ah, Rosana, primero ve a lavarte la cara y cambiate de ropa. Te llevaré de compras al centro comercial, escuché que llegaron nuevos diseños, perfectos para jóvenes damas como tú.”
La emoción en los ojos de Flora casi no podía sercutada, anhelaba la experiencia de vestir a su hija. Después de todo,
cuando vestía a Hilario de pequeño, un momento sin sentido de logro alguno en su arreglo.
Rosana vaciló un momento, buscando excusas
ra un adorable muñeco y al siguiente, un mono revolcándose en el barro,
la rechazar la oferta.
Dionisio miró la hora y dijo: “Ella debe regresar a la escuela, el dormitorio cierra a cierta hora.”
“Ah, había olvidado eso. Entonces, lo dejamos para la próxima.” La decepción era evidente en los ojos de Flora.
Rosana solo pudo asentir. Desde que escuchó de boca de Flora que no había ningún compromiso entre Dionisio y Keira, su corazón se había inquietado. La razón principal por la que estaba tan enojada y había terminado con él, fue por su supuesta
elación con Keira, pero ahora entendía que esa chica le había mentido.
En ese momento, Dionisio agarró a Rosana por la muñeca: “Yo la llevaré de regreso.”
Flora rápidamente dijo: “Lleva todas las cosas que compré.”
“Yo le compraré lo que necesite.”
Rosana, no tuvo oportunidad de responder, siendo llevada por Dionisio.
Al salir del salón, ella se detuvo instintivamente, su expresión era algo incómoda: “Todavía no me he cambiado de ropa.”
“Le pediré a Yolanda que te la traiga.”
Él prefería no dejarla sola con su madrastra, temiendo que revelara algo indebido.
Pero Rosana, con el rostro enrojecido y hablando en voz baja, dijo: “No llevo ropa interior.”
Estaba usando una ropa holgada en el salón de belleza, ¿cómo podría salir así?
La mirada de Dionisio cayó sobre ella y se quitó su chaqueta para cubrirla, luego miró a las personas a su alrededor: “Consíganle una habitación para que se cambie.”
Con el rostro aún cubierto de mascarilla de algas, ciertamente no podía salir así.
Pronto, Yolanda llegó y guio a Rosana a otra habitación.
Después de lavarse la cara y cambiarse, Rosana finalmente se sintió aliviada. Mirando a Yolanda, sintió una sospecha: “¿Trabajas para mí por orden suya?”
Inicialmente pensó que el equipo TG trabajaba con ella debido Óscar. Ahora, entendía que todo había sido un arreglo de
Dionisio.
La expresión de Yolanda fue algo incómoda: “Señorita Lines, el señor Jurado se preocupa mucho por usted, no es para vigilarla.”
La protección que Dionisio ejercía sobre Rosana definitivamente no era un juego.
Sin decir nada, Ella salió de la habitación y lo vio esperando afuera. Dionisio, de espaldas a ella, parecía estar hablando en voz baja, con una seriedad y autoridad que Rosana nunca había visto antes.
Cuando ella aparecer, él se giró, su expresión se suavizó considerablemente y tras dar unas indicaciones rápidas, se acercó a ella. Al verlo acercarse, Rosana se sintió desorientada por un momento, hasta que Dionisio se detuvo frente a ella, intentando tomar su mano de forma instintiva, ella se apartó. Sabía que el hombre que acababa de ver era cómo él solía
ser.
Ese rechazo pareció congelar el aire entre ellos por un momento.
Ce la mano en el aire y una sonrisa amarga en sus labios, Dionisio dijo: “No te tomes en serio lo que dijo mi madre.”
Rosana levantó la vista, diciendo de forma deliberada: “La señora Jurado quiere que sea su ahijada y me ofreció muchas propiedades, eso si que podria considerarlo. Seríamos como hermanos,”
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Capitulo 612
Ella’no sintió que Flora intentase humillarla con dinero. Pero la cara de Dionisio se oscureció al instante: “De eso nada, no necesito una hermana.”
Lo que le faltaba era una esposa.
