Capítulo 517
Recordó que en aquel entonces, sí sentía algo de cariño por su esposa arreglada, después de todo, ella era el epitome de belleza, riqueza y éxito, con una piel tan blanca que parecía brillar y un impresionante currículum académico, además de un cerebro brillante. En ese tiempo, ella ganaba dinero a una velocidad que él solo podía soñar alcanzar. Y además, era una belleza sin igual.
De verdad le gustaba, pero lamentablemente, el brillo de ella eclipsaba todas sus cualidades. Al lado de ella, siempre sería un personaje transparente, insignificante, con todas las miradas siempre posadas en ella.
Con el tiempo, su presencia se fue haciendo cada vez más tenue. Empezaron a surgir voces que decían que no era digno de ella, que era como poner flores en estiércol, y él se fue sintiendo cada vez más inferior.
Por su complejo de inferioridad, su humor empezó a deteriorarse. Desarrolló una severa depresión y se volvió frío e indiferente hacia ella.
Finalmente, tomó un camino que lo alejó de ella. Le fue infiel. Su nueva amante era una mujer sin un grado académico notable ni una belleza destacable, pero lo idolatraba. Y para él, eso era
suficiente.
Quería que todos supieran que su tipo ideal de mujer era una amable esposa y madre devota, no una esposa original que deslumbrara a todos con su brillo.
Pero lo que no sabía era que esa mujer deslumbrante estaba profundamente enamorada de él. Su infidelidad destrozó su orgullo. Ella eligió morir por amor, en homenaje a aquel amor que había perdido. Pero él no estaba muerto.
Su muerte le trajo un castigo peor que cualquier pena legal. Fue señalado y vilipendiado por
miles.
Solo su nueva amante se mantuvo a su lado, inquebrantable.
Al parecer, para probarle a todos que su amor por esa mujer de cabaret era real y que su matrimonio anterior había sido un error, se casó con ella en un acto de pura obstinación. Y así, se convirtió en el eterno amante desdichado.
Al final, obtuvo el perdón de la sociedad.
Finalmente, la gente empezó a comprenderlo: el amor verdadero trasciende las barreras sociales. Una mujer tan poderosa realmente no era para él.
Pero ¿Acaso esa era la verdad?
Solo él sabía lo intensas que eran sus emociones cuando besaba a su primera esposa, y frente a su actual esposa, tenía que fingir amor, aunque su cuerpo no reaccionaba de la misma
manera.
La puerta de la mansión se abrió y el guardia salió.
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Capítulo 517
Al ver a la familia de Florentino, el guardia los miró con frialdad: “Supongo que vienen a buscar a mi señor, pero él nunca recibe visitas. Será mejor que regresen por donde vinieron.”
Florentino intentó ser ingenioso: “¿Y si te dijera que hoy vinimos a ver a la señorita Aurora?”
El guardia se quedó sin palabras.
Pero la astucia de Florentino no fue suficiente, y con frialdad, el guardia dijo: “Esperen, iré a preguntar.”
La naturaleza impulsiva de Federico hizo que se enfureciera inmediatamente con la actitud del guardia: “¿Quién te crees que eres para hacer esperar a mi abuelo?”
El guardia, con una chispa de frialdad en sus ojos, respondió: “Señor Nolan, recuerde: lo que hoy es rio, mañana puede ser desierto. Cuídese de no caer más bajo que yo algún día.”
Dicho esto, el guardia se marchó.
Federico se quedó furioso, y sus ojos brillaron con ira.
“Ese tipo es un arrogante.”
Florentino lo reprendió: “Tiene el derecho de serlo.”
Federico, confundido, escuchó la fría respuesta de Florentino: “Si la familia Nolan quiebra, hasta los perros del Grupo Impulsa 21 tendrán más prestigio que tú.”
Federico tembló, casi cayendo al suelo. Luego esperó, honestamente, poder ver a las personas que estaban adentro.