La Directora de mi Histora 25

La Directora de mi Histora 25

Capítulo 25 

-Si lo perdės, lo perdés -manifestó Rafael con serenidad. Es simplemente un anillo, mi esposa puede permitirse ese lujo

Amelia ya no encontró motivo para rehusarse. Sin percatarse siquiera, asintió con la cabeza

-Está bien

La mañana siguiente, mientras acomodaba las camisas de Rafael, Amelia recibió una llamada de Ivana comunicándole que el fotógrafo del equipo de rodaje había dimitido súbitamente junto con todo su personal

-¿Cual fue el motivo? -inquirió Amelia con severidad

Rafael, advirtiendo que tenía asuntos profesionales que atender, le indicó que podía encargarse 

solo

Amelia soltó la camisa y se retiró al borde de la cama, escuchando cómo Ivana exclamaba 

frustrada

-Los sedujo Carla con mejores condiciones. Entiendo que quieran aprender de Agustín, pero jamás vi un equipo de fotografía con tan poca profesionalidad

Era evidente que Carla lo había hecho adrede. De otra manera, aunque compitieran por la misma temática, no habría necesidad de llevarse tanto a la protagonista como al fotógrafo

-Necesitamos conseguir un fotógrafo urgente -sugirió Ivana-. Voy a averiguar quién tiene. disponibilidad inmediata

Durante los días posteriores, Ivana le envió varios perfiles de fotógrafos, pero Amelia los desestimó a todos

-Reconozco que no son los mejores profesionales -explicó Ivana-, pero los equipos de calidad ya tienen su agenda comprometida. Es prácticamente imposible encontrar alguien libre a corto plazo. Tendríamos que postergar el proyecto

-Nuestro presupuesto no contempla demoras -respondió Amelia con disgusto-. No nos queda más remedio que tragarme el orgullo y recurrir a mi antiguo profesor de fotografía

-¿Tu profesor? ¿De quién hablás? ¿Creés que aceptaría? -preguntó Ivana intrigada

-Es Ricardo

-¿Qué Ricardo? -Ivana meditó un instante antes de exclamar-: ¿No será el Ricardo que estoy imaginando? ¿El ganador del Oscar a mejor fotografía

-Exactamente -confirmó Amelia

-¡Por Dios! ¿Él te enseñó fotografía? Nunca me lo mencionaste. ¿Por qué no aprovechaste ese 

1/2 

02:

Capítulo 25 

contacto antes? -preguntó Ivana entusiasmada-. Agustín siempre pierde el premio frente a Ricardo. ¡Con él de nuestro lado, tenemos el proyecto asegurado

Aunque Ivana rebosaba de entusiasmo, Amelia dudaba poder convencerlo. Al fin y al cabo, Ricardo no mantenía una relación cercana con ella, sino con la familia Peretti. Durante su infancia, cuando quiso aprender fotografía, coincidió que los Peretti contrataron a Ricardo como instructor de Rafael, lo que le permitió asistir a esas clases

Ricardo, cercano a los setenta años y semiretirado, probablemente declinaría su propuesta. Sin embargo, debía intentarlo. Afortunadamente, en los últimos años había mantenido la costumbre de visitarlo con Rafael durante las festividades navideñas, por lo que su visita no resultaría completamente inesperada

Adquirió personalmente un obsequio y condujo hasta su domicilio. Ricardo vivía en una casa restaurada en la ciudad de Buenos Aires, con un patio ornamentado al estilo oriental

Al ingresar, Amelia encontró a Ricardo y Rafael sentados junto al ventanal, saboreando una infusión recién preparada. Su sorpresa fue evidente

-¿Vinieron por separado sin avisarse? -bromeó Ricardo con una sonrisa afable

Amelia experimentó cierta incomodidad, mientras Rafael respondió con naturalidad

-Ella está completamente absorta con la producción estos días, preferí no interrumpirla

Esperanza Sánchez, el ama de llaves, tomó rápidamente los presentes de Amelia e invitó

todos a tomar asiento

Amelia se aproximó a la mesa y le preguntó a Rafael

-¿Y vos qué hacés acá

-Vine a conversar sobre la campaña publicitaria del Grupo Peretti para el año próximo -respondió Rafael sereno

Ricardo siempre había sido el responsable creativo de las campañas del Grupo Peretti. Apenas Rafael terminó de hablar, tomó la jarra para servir más agua, pero Amelia se adelantó

Vertió el agua y depositó la jarra sobre el brasero, sonriendo: 

-El mate que preparás siempre tiene un sabor único

Ricardo correspondió a la sonrisa

-El agua calentada con carbón hace que el mate tenga un gusto especial

Amelia tomó asiento junto a Rafael y, cuando el agua comenzó a hervir, se dispuso a preparar el mate, pero Ricardo extendió su mano

-Sos nuestra invitada, permitime… 

Rafael lo detuvo

-No hace falta, ella también debe atenderte

49.51 

Capítulo 25 

Ricardo observaba a Amelia mientras preparaba la infusión, señalando a Rafael con media 

sonrisa

-Mirá, si no cuidás a tu esposa como corresponde, alguien podría llevársela

Los rumores recientes circulaban con tal fuerza que hasta Ricardo participaba de la broma

Amelia, mientras añadía el agua, respondió con docilidad

-Quedate tranquilo, nadie va a llevarme a ningún lado

Rafael arqueó las cejas

El recipiente para preparar la infusión estaba demasiado elevado y cuando el chorro de agual descendía, varias gotas salpicaron el dorso de la mano de Amelia, quien no pudo contener un ¡ay!de dolor

Rafael se incorporó de inmediato, tomó el recipiente y lo apartó

-¿Te lastimaste

-No es nada, apenas una gotita… 

Rafael frunció el ceño y la condujo rápidamente hacia la cocina, abriendo el grifo

Con la muñeca firmemente sujetada por Rafael, el agua fría cayó instantáneamente sobre el dorso de su mano, provocando que Amelia emitiera otro jay!involuntario

-¿Te duele mucho

-No me duele -Amelia lo miró fijamente-. Está helada el agua

Esperanza rio alegremente

-Mirá vos, Rafa, qué preocupado estás

Rafael, manteniendo su expresión imperturbable, cerró el grifo

-Si no te duele, mejor. Quedate en la cocina asistiendo a la señora

Parecía reprocharle su torpeza

Amelia asintió

-Está bien

Rafael bajó la mirada hacia donde sostenía su muñeca y la liberó lentamente

02:51

La Directora de mi Histora

La Directora de mi Histora

Score 9.9
Status: Ongoing Type: Native Language: Spanish
La Directora de mi Histora

 

Comment

Leave a Reply

Your email address will not be published. Required fields are marked *

Options

not work with dark mode
Reset